lunes, 22 de febrero de 2016

Quiero

Quiero que nadie me diga que sentir, que decir, que pensar. Quiero ser yo mismo, con las consecuencias que esto conlleva. 

Quiero que me digan lo mal que lo hice, lo mal que me comporté y lo inmaduro que jugué. 

Quiero que me digan lo mucho que me odian, el asco que me tienen. 

Quiero que me hablen de lo inútil que soy, de lo iluso y fracasado que soy y seré. 

Quiero que me griten lo mal que lo estoy haciendo, que me recuerden lo tarde que llego, y lo lento que voy. 

Quiero que me discutan lo que digo, lo que dejo de decir, y lo que nunca dije. 

Quiero que me susurren una y otra vez que no llegaré, que no sueñe tan grande.

Quiero que me canten todo, menos lo bueno que soy. 

Pero sobre todo quiero vivir. Quiero que todos los que me dicen, los que me gritan, los que me discuten, los que me susurran, los que me cantan, quiero que todos y cada uno de ellos vea lo lento que voy. Quiero que vean lo que tan grande sueño. 

Quiero que nunca paren de hablar, de decir, de gritar, de discutir, de susurrar, de cantar, por que yo tampoco lo haré. Nunca pararé de reír, de llorar, de caer y levantar. Pero sobre todo y lo mas importante,  nunca dejaré de ser feliz. 




lunes, 1 de febrero de 2016

Soy aquel

 Soy aquel que te dijo que ya no te quería. Aquel que te dijo que ya no sentía, que no quería tener nada que ver contigo, y que no pensaba disfrutar más a tu lado.

Soy aquel que pasó de decirte un día te quiero a soltarte el próximo día que ya no te pensaba, que no te echaba de menos, y que ya ni siquiera se acordaba de lo que era estar contigo, de sentirte, o simplemente aquel que no se acordaba lo que era abrazarte. 

Soy aquel pesado que no podía verte mal, y que cuando sentía que algo en ti no iba bien, y no te encontrabas bien, a pesar de lo que estuviera haciendo sacaba un rato para escucharte e intentar hacerte un poco mas feliz. 

Soy aquel que se enfadaba constantemente por milongas, por cosas sin sentido. Aquel que cuando se enfadaba no podías hablar con él por lo tonto que se ponía. 

Soy aquel que tenía momentos tan insoportables que daba hasta asco, era repugnante y escoria. Aquel lleno de imperfecciones, de defectos y sobre todo lleno de errores.

Soy aquel que siempre tenía un abrazo, un abrazo para darte impulso, un abrazo para los momentos malos, para que pensases en los buenos. 

Soy aquel gilipollas que te aguantó en las malas, en las jodidas y en las asquerosas. Aquel que se jodió se levantó y aun así siguió peleando apenas sin energías ni fuerzas y teniendo muros y vallas en frente. 

Soy aquel que falló, que cayó, que defraudó, que decepcionó, pero sobre todo soy aquel que no puede prometer ni finales felices, ni que todo irá bien. Solamente soy aquel que puede aguantar tormentas, chaparrones, granizos o ventiscas para luego ser más fuerte, creer más fuerte, y querer más fuerte.